Margarita delante del espejo

Manuel Domínguez Sánchez (1866)
Museo Nacional del Prado, Madrid

La protagonista de la pintura es Margarita, la hermosa joven de la que Fausto ('Fausto', Goethe) se ha enamorado. Fausto es anciano y vende su alma al Diablo a cambio de recuperar la juventud y conquistar a la bella Margarita. Como gesto de que Margarita sucumbe a la vanidad el Diablo deja en su habitación un pequeño cofre con joyas que ha de probarse, símbolo de que cederá a las tentaciones del Maligno.